8 Y a ella se le ha concedido que se vista de lino fino, limpio y resplandeciente; porque el lino fino es las acciones justas de los santos. —APOCALIPSIS 19:8

BODASCORDEROINVITADOSCONVIDADOSLEY

El pasado 29 de Abril tuve una conversación en un grupo de WhatsApp, y—como ya es constumbre, siempre que se presenta una verdad los “buenos” hijos salen a defender a su padre. Pero en esta ocasión uno de ellos salió a defener a su madre, la Iglesia Católica.

Ahí había un pleito entre evangélicos, católicos y adventistas, cada cual clamando estar en la iglesia verdadera; que la secta de cada uno era La Esposa de Cristo. Pero como ya hemos demostrado en tantas ocasiones, Dios no tiene iglesia en esta tierra (ISA. 4:1, APC.14:4), y ni siquiera un reino en la tierra que él mismo creó. (JUAN 18:36). Lo que si tiene es un pueblo santo y escogido, con un par de caracsterísticas muy distintivas—

12 Aquí está la paciencia de LOS SANTOS, los que GUARDAN los mandamientos de Dios y la fe de Jesús. —APOCALIPSIS 14:12

Ah, los que guardan los manadmientos de Dios y tienen la fe de Jesús. ¿Cuáles mandamientos?

16 Entonces vino uno y le dijo: Maestro bueno, ¿qué bien haré para tener la vida eterna?
17 El le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno sino uno: Dios. Mas si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos.
18 Le dijo: ¿CUÁLES? Y Jesús dijo: No matarás. No adulterarás. No hurtarás. No dirás falso testimonio.
19 Honra a tu padre y a tu madre; y, Amarás a tu prójimo como a ti mismo. —MATEO 19:16-19

¿Y dónde encontramos esos mandamientos? Bueno, léase Éxodo 20:1-17; esta es la ley de los diez mandamientos—LA LEY DE DIOS. Así que Jesús le dice a este joven poderoso que para obtener la vida eterna debe guardar la ley de los diez mandamientos; ley que Jesús mismo dio, tanto en el principio (GÉN. 2:16-17 & 3:15, OSEAS 6:7) como en el Sinaí (ÉXD. 20:1-17). [a]Jesús, el Ángel de Jehová
[ESTUDIO, CristoVerdad]
[2]La Ley,Los Judíos & Tú
[ESTUDIO, CristoVerdad]

Ahora bien, la ley tiene diez mandamientos (ÉXOD. 34:28), mas sin embargo en su interacción con el joven rico Jesús solo hace referencia al 6to, 7mo, 8vo, 9no, y 5to mandamiento, en ese mismo orden, mas “otro” mandamiento: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. Le ley tiene diez, mas Cristo menciona cinco, más uno. ¿Nunca se ha preguntado porqué?

Bueno, los primeros cinco mandamientos aquí expresados por Jesús vienen del segundo grupo del decálogo, los que tienen que ver con la relación del hombre con su prójimo, el área donde estaba fallando el joven rico, aunque él dijo: “todo esto he guardado desde mi junventud” (MAT. 19:20). Es evidente que eso no era cierto, y por éso Jesús lo mandó a despojarse de todo. Note el contraste cuando comparamos la historia del joven rico con la historia de Zaqueo—

5 Cuando Jesús llegó a aquel lugar, mirando hacia arriba, le vio, y le dijo: Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose yo en tu casa.
6 Entonces él descendió aprisa, y le recibió gozoso.
7 Al ver esto, todos murmuraban, diciendo que había entrado a posar con un hombre pecador.
8 Entonces Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor: He aquí, Señor, la mitad de mis bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cuadruplicado.
9 Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación a esta casa; por cuanto él también es hijo de Abraham.
10 Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido. —LUCAS 19:5-10

Al encontrarse con Jesús, Zaqueo se despojó de sus bienes, y reparó lo que había hurtado. Y hurtar—no lo olvide, es condenado en el decálogo de Dios. Ahora,\ veamos la reacción del joven rico al encontrase con Jesús—

20 El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta?
21 Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme.
22 Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones. —LUCAS 19:20-22

El joven rico era avaro, y por eso Jesús lo enfrentó con los mandamientos que él no estaba guardando, aunque él decía hacerlo. Zaqueo no tuvo ese problema. En retrospectiva, los diez mandamientos están divididos en dos grupos: a) Primer grupo, que abarca la relación del hombre con Dios, registrado en los primeros 4 mandamientos de la ley, y b) El segudno grupo, que tiene que ver con la relación del hombre con su con el prójimo, como ya mencionamos, registrados en los mandamientos de sexto al décimo. Aunque la Biblia no determina con certeza la alineación exacta entre las dos tablas de piedras, lo cierto es que si es evidente que son dos grupos que abarcan dos terrenos diferentes: el de Dios y el del hombre.

Una vez más, los primeros cuatro mandamientos de la ley, que Jesús no mencionó al joven rico, tienen que ver con la relación del hombre con Dios (ÉXD. 20:1-11). Y es obvio que usted no va a llegar al cielo, a) teniendo dioses ajenos, b) adorando imágenes, c) tomando el nombre de Dios en vano, y d)—Complete usted el epacio en blanco, sin guardar el_______ (ÉXD. 208-11). Por eso Jesús no nombró estos mandamientos, pues al parecer el joven rico estaba claro en ellos, como todo “buen” judío que él era.

Ahora bien, no olvidemos el “otro” mandamiento que Jesús ordenó al joven rico guardar, “amarás a tu prójimo…”. Bien, resulta que este “otro” mandamiento, como el mismo texto lo indica, tenía que ver con la relación del hombre con su prójimo. O sea, Jesús solo estaba dando un énfasis en los mandamientos de la segunda tabla de la ley. Note que el joven rico no argumentó con Jesús diciendo algo sí como: “pero señor, yo ayudo al pobre” o doy el diezmo que es de para las viudas y los huérfanos” (DEUT. 14:22-29), ¿por qué me mandas a despojarme de todo?”. No, él simplemente se fue triste porque su tesoro no estaba en el ayudar al pobre—que es su prójimo, sino en atesorar sus posesiones, como el mismo texto presenta.

Y usted dirá, ¿pero que tiene todo esto que ver con la esposa de Cristo? No perdamos el hilo, preste atención y sea paciente, por favor…

“Amarás a tu prójimo como a tí mismo” es guadar los mandamientos que el joven rico rechazó; la Biblia así lo presenta. En la historia del buen samaritano, el joven intérprete de la ley hace a Jesús la misma pregunta que el joven rico hizo—

25 Y he aquí un intérprete de la ley se levantó y dijo, para probarle: Maestro, ¿haciendo qué cosa heredaré la vida eterna? —LUCAS 10:25

Y en esta ocasión, Jesús responde con otra pregunta—

26 Él le dijo: ¿Qué está escrito en la ley? ¿Cómo lees? —LUCAS 10:26

Y el texto continúa—

27 Aquél, respondiendo, dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con todas tus fuerzas, y con toda tu mente; y a tu prójimo como a ti mismo.
28 Y le dijo: Bien has respondido; haz esto, y vivirás. —LUCAS 10:27-28

Esencialmente hablando, aquí el intérprete de la ley contesta lo que jesús le contesó al joven rico. Note que—nuevamente, es el intérprete de la ley quien contesta, no es Jesús quien da la respuesta. Este detalle es sumamente importante, pues los judíos ya sabían lo que se necesitaba para llegar al cielo: amar al señor, guardando su ley. ¿Cómo así? Bueno, Jesús dijo al joven rico “amarás a tu prójimo como a tí mismo” (2do grupo de la ley), mientras que el intérprete de la ley es quien repite lo mismo (2do grupo de la ley), pero primero nos da “amarás a tu Dios con todo tu corazón…” (primer grupo de la ley). Veamos el siguiente texto para verificar y entender esto…

3 Oye, pues, oh Israel, y cuida de ponerlos por obra, para que te vaya bien en la tierra que fluye leche y miel, y os multipliquéis, como te ha dicho Jehová el Dios de tus padres.
4 Oye, Israel: Jehová nuestro Dios, Jehová uno es.
5 Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas. DEUTERONOMIO 6:3-5

El capítulo 6 del libro de Deuteronomio viene inmediatamente después de la lectura de la ley de los diez mandamientos en el capítulo 5. Es decir, es la misma secuencia en el texto. Y en Deuteronomio 6:5 encontramos las palabras exactas que el intérprete de la ley estaba dando a Jesús.  Algo consistente con los evangelios es que se complementan. Algunas historias—o parte de ellas no aparecen en algunos de los evengelios, y solo obtenemos el cuadro completo cuando los estudiamos los 4. En Mateo 19 Jesús dice al joven rico “amarás atu prójimo como a tí mismo”, y en Lucas 10 el intérprete de la ley lo repite y agrega al mandamiento del amor hacia Dios, y jesús dice estar de acuerdo—

28 Y le dijo: Bien has respondido; haz esto, y vivirás. —LUCAS 10:28

Ahora bien, tenemos otra histora parecida, donde jesús se enfrenta a otro intérprete de la ley, un fariseo. Aunque muchos se confunden, es obvio que son historias diferntes. en tiempos diferentes. Veamos—

35 Y uno de ellos, intérprete de la ley, preguntó por tentarle, diciendo:
36 Maestro, ¿cuál es el gran mandamiento en la ley?
37 Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.
38 Este es el primero y grande mandamiento.
39 Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.
40 De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas. —MATEO 22:36-40

Note que en esta ocasión, el intérpre de la ley pregunta cual es el gran mandamiento, y no dice que como se obdtiene la vida eterna. En realidad el contexto de sus palabras es el mismo, pues si usted viola el gran mandamiento usted no tiene chance alguno de obetenr la vida eterna, y los fariseos tenían eso bien claro. Pero lo intersanate aquí es que es Jesús quien da la respuesta, tal como hizo en la historia del joven rico. Pero en la historia del joven rico jesús no menciona este gran mandamiento: “amarás a tu Dios con todo tu corazón…”

Obviamente, Jesús está citando lo que está “en la ley”, Dueteronomio 5 & 6. Pero la parte clave en la coversación de Jesús con este intérprete, la tenemos en el versículo 40 de Mateo 22, y repetimos—

40 De estos dos mandamientos DEPENDE toda la ley y los profetas. —MATEO 22:36-40

El texto de Mateo 22 siempre ha sido utilizado por muchos para decir que estos dos mandamientos reemplazan la ley de los diez mandamientos, ALGO TOTALMENTE FALSO. Jesús dice de “estos dos manndamientos depende la ley y los profetas.” Y la clave es la palabra depende, que indica es que amar a Dios sobre todas las cosas y y tú prójimo como a tí mismo es lo que da origen a toda la ley, no que la reemplaza. Conteste, Amigo que está leyendo esto, si su vida depende de un catete en su corazón, ¿puede usted vivir sin el catete? ¿rempleza el catete su corazón?

Otro dato importante es que de estos dos mandamientos no solo depende la ley, sino también los profetas. Es decier, de esto depende los libros proféticos, tales como Isaías, Jeremías, Daniel y El Apocalipisis. Si la confirmación de estos dos mandamientos significa que la ley de los diez mandamientos está abolida, entonces esto quiere decir que los profetas ta,bién quedqn abolidos. Y si quedan abolidos los profetas, lo que se dice en los libros porféticos también están abolidos, y aquí es que entraríamos un conflicto enorme, pues todo lo que hemos creído de Dios se derrumba, pues—

a) Hay profecías que todavía no se han cumplido, tales como Isaías 66:22:23 que habla de la creación de la tierra nueva y los cielos nuevos, y jesús es quien crea esa tierra nueva (APC. 21:5). Y Jesús, quién también fue profeta, ¿Se abolió Jesús así mismo?

b) La profecía de Daniel 2 culimina con la segunda la venida de Cristo (DAN. 2:34-35, 45). ¿Eliminó Jesús su segunda venida? ¿Depende nuestra salvación de que jesús vuelva otra vez a la tierra?

c) En Daniel 9:25-28 se nos habla de lo que realmente sucedió en la cruz. [1]Jesús “vs.” Pablo y La Ley:
Lo Que Pasó en la Cruz
[ESTUDO, CristoVerdad]
¿Cómo puede jesús estar eliminando algo que todavía no había acontecido, pues—OBVIAMENTE, al momento de pronunciar las palabras de Mateo 22 él todavía no había sido crucificado? Si la ley y los profetas fueron eliminados, entoces también la crucifixión de Jesús fue eliminada. ¿Murió o no murió Jesús en una cruz?

Podemos seguir y seguir, y todo lo que hemos creído se derrumba, todo. Y todo lo que está en la Biblia gira alrededor de la ley de Dios—todo, pues la ley es el carácter de Cristo mismo—

EL CARACTER DE CRISTO
16 porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo. —1 PEDRO 1:16 (Ver Apoc. 15:4) 

12 De manera que la ley a la verdad es santa, y el mandamiento santo, justo y bueno. —ROMANOS 7:12

Por eso es que encontramos la ley desde el Génesis al Apocalipsis, pues Jesús mismo es “el alfa y la omega”. Y la ley nos da vida así como Cristo da vida, pues la ley—que es vida, es Cristo mismo (JUAN 14:6. APC. 22:14, ROM. 8:2, SAL. 119:142).

Una vez más,

2 Guarda mis mandamientos y vivirás, y mi ley como las niñas de tus ojos.
3 Lígalos a tus dedos;
Escríbelos en la TABLA de tu corazón. —PROVERBIOS 7:2-3

¿En dónde hemos esuchado esto antes?

31 He aquí que vienen días, dice Jehová, en los cuales haré nuevo pacto con la casa de Israel y con la casa de Judá.
33 Pero este es el pacto que haré con la casa de Israel después de aquellos días, dice Jehová: Daré mi ley en su mente, y la escribiré en su corazón; y yo seré a ellos por Dios, y ellos me serán por pueblo. —JEREMÍAS 33:33

Aclaro, cuando el texto dice “con la casa de Israel y la casa de Judá” solo está haciendo referencia a toda la humanidad (ISA 56:1-7). ¿O no pertenecía Judá a Israel, no suena redundante? Aquí lo que vemos es un énfasis de que aquellos que guarden el pacto—la ley y sus diez mandamientos, SERÁN INVITADOS A UNA FIESTA MUY ESPECIAL, cuando jesús reclame el reino que hoy día el diablo domina—

25 Y hablará palabras contra el Altísimo, y a los santos del Altísimo quebrantará, y pensará en cambiar los tiempos y la ley; y serán entregados en su mano hasta tiempo, y tiempos, y medio tiempo.
26 Pero se sentará EL JUEZ, y le quitarán su dominio para que sea destruido y arruinado hasta el fin,
27 y que el reino, y el dominio y la majestad de los reinos debajo de todo el cielo, sea dado al pueblo de los santos del Altísimo, cuyo reino es reino eterno, y todos los dominios le servirán y obedecerán. —DANIEL 7:25-27

Este evento, mis amigos y hermanos, se conoce como “Las bodas del cordero”, cuando Cristo venga a buscar a su pueblo—no a su iglesia, sino a su pueblo. Y este pueblo es llamado santo, pues guarda la ley (APC. 14:12). Ahora bien, ¿es este pueblo la esposa de Cristo? La respues es un NO rotundo. El pueblo de Dios y la esposa de Cristo son dos cosas diferentes, usualmente asociados como lo mismo. Así que debemos saber distinguir esta separación y entender cuál es el rol de cada uno.…

Como les menciomé al principio, tuve un intercambio en un grupo de WhatsApp hace unos meses atrás, y el amigo católico hizo el siguiente comentario—

LA SUPUESTA ESPOSA DE CRISTO
“No anuncio fundar “otra iglesia “. para que nadie se confunda…y que hacen ? Se van dividiendo en miles de sectas cada vez más” —Amigo Católico Confundido, [4:29 PM, 7/28/2020]

Lo que aquí este caballero está aludiendo de que Jesús fundó la Iglesia Católica, una vil mentira, como también lo es decir que él fundó a Los Mormones, Bautistas, Testigos de Jehová, Adventistas, Bautistas, Evangélicos, Pentecostales, Metodistas, etc., etc., etc. Todo lo que hoy el hombre llama Iglesia lo fundó Roma, todo, absolutamente todo—

4 Y la mujer estaba vestida de púrpura y escarlata, y adornada de oro, de piedras preciosas y de perlas, y tenía en la mano un cáliz de oro lleno de abominaciones y de la inmundicia de su fornicación;
5 y en su frente un nombre escrito, un misterio: Babilonia La Grande, LA MADRE DE LAS RAMERAS y de Las Abominaciones de La Tierra. —APOCALIPSIS 17:4-5

Nadie parece mecionar a las hijas en este tiempo, pero ellas son las autodenominadas “iglesias protestantes”, hijas que esta gran ramera (ROMA) parió. A ellas las vemos descritas claramente en Apocalipsis 14:4, así como en los capítulod 2 &3, todas llenas de contaminación. Isaías presentó que ninguna de ellas sirviría a Cristo, mas lo usarían como carnada—

1 Echarán mano de un hombre [CRISTO] siete mujeres [TODAS LAS IGLESIAS] en aquel tiempo [DEL FIN], diciendo: Nosotras comeremos de nuestro pan [FALSAS DOCTRINAS], y nos vestiremos de nuestras ropas [JUSTICIA Propia]; solamente permítenos llevar tu nombre [Cristianas], quita nuestro oprobio. —ISAÍAS 4:1

No hay que indagar mucho para ver que esto es los que son todas las denominaciones cristianas que hoy vemos, todas. Todas claman servir a Cristo, mas todas han rechazado su ley—todas, incluyendo a Babilonia Adventista, la cual hipócritamente clama guardarla.

En pocas palabras, todas la Iglesias, están contaminadas, y no olvidemos que el pueblo de Dios “no se contamina con mujeres” (APC. 14:4). ¿Estás tú contaminandote en una de esas sinagogas de Satánas?

Guía Adventista Para Familias LGBTs

Pero Pablo habló de iglesias, ¿No? Pues sí, así como Dios habló de matrimonio, y hoy día se le llama matrimonio a dos hommbres—o dos mujeres en una cama. Si vamos a hablar de iglesias, debemos mantenernos en el margen de lo que Dios llama Iglesia en la Biblia, una congregación Santa, que guarda su ley. Pero independientemente de esto, ¿se casa Cristo con la iglesia, es decir X o Y denominación allá afuera? Bueno, aquí les presento mi respuesta a la interacción que tuve en el grupo de WhatsApp.

[4:29 PM, 7/28/2020] José Luis Javier Núñez
Amigo, la iglesia de Cristo viene del cielo. ¿No lo sabía?

12 Al que venciere, yo lo haré columna en el templo de mi Dios, y nunca más saldrá de allí; y escribiré sobre él el nombre de mi Dios, y el nombre de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén, la cual desciende del cielo, de mi Dios, y mi nombre nuevo. —APOCALIPSIS 3:12

Tengo que aclarar que cuando hablo de iglesia, en este caso particular, me refiero a la verdadera esposa de Cristo, que no está cimentada en esta tierra.

2 Y yo Juan vi la santa ciudad, la nueva Jerusalén, DESCENDER DEL CIELO, de Dios, dispuesta como una esposa ataviada para su marido.
9 Vino entonces a mí uno de los siete ángeles que tenían las siete copas llenas de las siete plagas postreras, y habló conmigo, diciendo: Ven acá, yo te mostraré la desposada, la esposa del Cordero.
10 Y me llevó en el Espíritu a un monte grande y alto, y me mostró la gran ciudad santa de Jerusalén, que descendía del cielo, de Dios,
11 teniendo la gloria de Dios. Y su fulgor era semejante al de una piedra preciosísima, como piedra de jaspe, diáfana como el cristal. —APOCALIPSIS 21:2, 9-11

7 Gocémonos y alegrémonos y démosle gloria; porque han llegado las bodas del Cordero, y su esposa se ha preparado.
8 Y a ella se le ha concedido que se vista de lino fino, limpio y resplandeciente; porque el lino fino es las acciones justas de los santos.
9 Y el ángel me dijo: Escribe: Bienaventurados los que son llamados a la cena de las bodas del Cordero. Y me dijo: Estas son palabras verdaderas de Dios. —APOCALPISIS 19:7-9

Somos llamados a las bodas—como invitados, no que las bodas son nuestra. Y para participar en esa gran boda hay que vestirse de santidad, pues tanto el novio como la novia son Santtos (HEB. 14:12, LEV. 20:7, 1 PED. 1:15-16). Nososotros no somos la esposa del cordero, somos los invitados a las bodas de cordero con su esposa—

7 Observando cómo escogían los primeros asientos a la mesa, refirió a los convidados una parábola, diciéndoles:
8 Cuando fueres convidado por alguno a bodas, no te sientes en el primer lugar, no sea que otro más distinguido que tú esté convidado por él,
9 y viniendo el que te convidó a ti y a él, te diga: Da lugar a éste; y entonces comiences con vergüenza a ocupar el último lugar. […]
12 Dijo también al que le había convidado: Cuando hagas comida o cena, no llames a tus amigos, ni a tus hermanos, ni a tus parientes, ni a vecinos ricos; no sea que ellos a su vez te vuelvan a convidar, y seas recompensado.
13 Mas cuando hagas banquete, llama a los pobres, los mancos, los cojos y los ciegos;
14 y serás bienaventurado; porque ellos no te pueden recompensar, pero te será recompensado en la resurrección de los justos. —LUCAS 14:7-9, 12-14

No se olviden de la historia de Zaqueo y el Joven rico.

Precisamente hoy estaba hablando con otro señor de otro grupo, llamado Con la Biblia Abierta, según ellos. Y ahí me dí cuenta de los errores abismales que tiene la gente allá afuera, con respecto a este tema.

Es decir, Dios tiene un evangelio para Israel y otro para el resto del mundo. De ahí mismo es que que viene el mismo error que la ley fue dada solo para los judíos. Y más que la ley, es esa partecita de la ley que todos ellos detestenan: el Sábado. Pero gloria a nuestro Salvador que pronunció esas palabras legendarias para destruir los argumentos de todos esos impíos: “El día de reposo fue hecho por causa del hombre…” (Marcos 2:27). Y el hombre—no el hombre judío, sino el hombre, fue hecho en el Edén (GÉN. 1:27). Y porque el hombre fue hecho en el Edén, el Sábado fue dado en el Edén (2:1-3).

Esta gente cree que Jesús viene a pasarse el Milenio con Israel solamente, y luego los cristianos se le unirán despues. Así como lo oyen, Jesús viene a recompensar al pueblo más perverso de la historia, Israel, el mismo que lo crucificó, por lo bien que se ha portado. Una sola andadita por Éxodo 19:5, OSEAS 6:7 y Juan 1:12 y 19:18 es suficiente para descartar a ese pueblo satánico como pueblo de Dios. Y si a eso le agregamos que Israel es probablemente el país más homosexual de todo el mundo, donde reconoce cualquier “matrimonio” entre Adán y Esteban, admás de aquella famosa estrella en su bandera, profetizada en Amós 5:25-26 y Hechos 7:43, no queda duda que ese pueblo tiene un padre, el originador de la mentira (JUAN 8:44).

Pero los cristianos siguen idolatrando a Israel, tal como siguen idolatrando a sus iglesias, aferrandoe a sus dioses ajenos.

La verdad es que esta gente no solo quiere nada que ver con santidad, sino que tampoco la entienden ni una sola pisca. Y este señor dice que “somos llamdos a ser la esposa de Jesucristo en el cielo.” Bueno, ya esa falsa postura la hemos desruído, con Biblia en manos.

Pero hay aún hay más…

2 El reino de los cielos es semejante a un rey que hizo fiesta de bodas a su hijo;
3 y envió a sus siervos a llamar a los convidados a las bodas; mas éstos no quisieron venir.
4 Volvió a enviar otros siervos, diciendo: Decid a los convidados: He aquí, he preparado mi comida; mis toros y animales engordados han sido muertos, y todo está dispuesto; venid a las bodas.
5 Mas ellos, sin hacer caso, se fueron, uno a su labranza, y otro a sus negocios;
6 y otros, tomando a los siervos, los afrentaron y los mataron.
7 Al oírlo el rey, se enojó; y enviando sus ejércitos, destruyó a aquellos homicidas, y quemó su ciudad.
8 Entonces dijo a sus siervos: Las bodas a la verdad están preparadas; mas los que fueron convidados no eran dignos.
9 Id, pues, a las salidas de los caminos, y llamad a las bodas a cuantos halléis.
10 Y saliendo los siervos por los caminos, juntaron a todos los que hallaron, juntamente malos y buenos; y las bodas fueron llenas de convidados.
11 Y entró el rey para ver a los convidados, y vio allí a un hombre que no estaba vestido de boda. [NO SE VISTIÓ DE SANTIDAD], NÚM. 15:37-41, ROM. 7:12.
12 Y le dijo: Amigo, ¿cómo entraste aquí, sin estar vestido de boda? Mas él enmudeció.
13 Entonces el rey dijo a los que servían: Atadle de pies y manos, y echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes.
14 Porque muchos son llamados, y pocos escogidos. —MATEO 22:7-2-14

Solos los guardadores de la ley de Dios están invitados a las bodas del cordero, y por eso comenzamos hablando de la ley. Una de las las mentiras más grandes que el diablo ha traído sobre esta tierra es que X o Y denominanción—llámese iglesia, es pueblo de Dios o que es la esposa de Cristo, cuando no hay una sola que esté vestida de santidad.

Todas las iglesias predican que Cristo se casa con ellas, mas Cristo dice que su esposa viene del cielo, juntamente con él para celebrar las bodas junto a sus invitados aquí en la tierra. Es decir, con aquél o aquella que se vista de santidad, guardando su ley, si quiere ver el rostro del señor (HEB. 14:12). Y con aquél que que no se olvidó del pobre, pues esto en sí mismo es parte de la ley—

23 !!Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque diezmáis la menta y el eneldo y el comino, y dejáis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia y la fe. Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello. MATEO 23:23

El joven rico no quiso hacer misericordia con el necesitado, y por eso no fue invitado a la gran fiesta. Mas no tenga duda que Zaqueo estará en primera fila en esa gran boda; asgúrese usted—amigo lector, de ponerse el atuendo adecuado (LA LEY) para que no le cierren la puerta en su propia cara. “Sín santidad,” no te vistas que no vas, pues si enlla—a tí que rechazas la ley y cualquiera de sus diez mandamientos, “nadie verá al señor”, incluyendote a tí.

JOSÉ LUIS JAVIER

“Salid de ella, pueblo mío (APC. 18:4)

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