Niños, Salud y Salvación

1. Así entró la efermedad a este mundo, comiendo lo que Dios dijo no comas. Muchos no asocian la entrada del pecado con la enfermedad. Pero la paga del pecado es muerte, y la muerte es la más grande de todas las enfermedades. Si Dios no hizo al hombre para morir (GÉN. 1:26-27), entonces tenemos que el hecho de que él hombre muera hoy es porque está enfermo, tanto física como espiritualmente.

Una vez se entiende cómo encontrar el gran tesoro de la salud que millones han perdido, toca pasar el legado a los más pequeños. El propósito de estas lecciones no ha sido enseñar cómo comer lo que se debe comer, sino NUNCA comer lo que no se debe comer. Lo demás es responsabilidad de cada persona individualmente. Hay mucha información al alcance de todos de cómo se debe comer lo que Dios hizo para comer. (GÉN. 1:29)

2. Si los adultos están sufriendo a causa de la mala alimentación, los niños no son la excepción. Ellos no eligen su dieta, les es dada por sus padres. Ellos son un templo en construcción (1 COR. 6:19-20), pero lamentablemente están siendo edificados en la generación de los peores constructores.

3. Si la gente pudiera ver en visión hacia dónde está llevando a sus pequeños, se daría cuenta que no es a otro camino que el de la muerte. Cada golosina/dulce, galleta, pizza, bebida gaseosa, y todo tipo de producto animal o comida procesada, los llevarán a una edad temprana a la tumba. Estas cosas son sumadas a la igualmente letal tecnología a la que hoy se los expone. Nadie—absolutamente nadie, tiene una idea al uno por ciento de las cosas que siempre han habido detrás de la comida animal, la procesada, y la tecnología que alimentan el cuerpo y cerebro de los niños. Cualquier veneno haría menos daño que todas estas cosas.

4. Una alimentación “Genésica” (Génesis 1:29) aseguraría la salud genética… Los genes portan el código de la Vida, pero ellos están todos enfermos.

5. Solo la eternidad será basta para explicar el daño causado en los niños. Niños que son forzados a la maldad de los adultos en todo el sentido. Niños en cuyo carácter no hay moderación gracias a la mala alimentacion. Hoy se les prepara para ser embajadores de la muerte, y no repelentes de todo lo que les garantice la fuente de la mayor riqueza, la salud. Criaturas glotonas (DEUT. 20:20-21; LUC. 21:34) entrenadas para comer basura, y sentir asco por lo que realmente sostiene la Vida: el agua, los vegetales y las frutas. No beben agua, sino gaseosas y jugos procesados. La muerte siempre está al acecho. No obstante, Dios hizo su parte. Puso en mayor cuantía en el planeta el agua, el oxígeno, las plantas y la luz. Hay otros elementos esenciales para la vida, pero sin los anteriores la existencia del hombre y los animales no duraría mucho tiempo.

6. El Maestro dijo:

¹⁴Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque  de los tales es el reino de los cielos. —MATEO 19:14

7. Esa es la promesa de Jesús para los niños, pero lamentablemente la mayoría no la heredará. Sus pequeños templos no están siendo limpiados con la escoba alimenticia divina. Jesús no está entrando a ellos através de la comida que él creó. Si ella no llega al Santo de esos templecitos, mucho menos al Santísimo. El camino de Jesús hacia nuestros corazones es un proceso que lleva un orden. Ningún paso es esquivado (Heb 9:8). Él es ese pan no leudado del tabernáculo y de la fiesta de los panes sin levadura (Éx 12:28; 35:13; Heb 9:2). Si el pan, Jesús, no entra al estómago, tampoco pasa al corazón, el cerebro.

8. El alto índice de muerte y enfermedades entre aquellos que debieran representar el vigor y la salud es alarmante. Los niños ya no son el símbolo de la vida y la salud. Ellos también sufren las enfermedades que antes eran comunes en los adultos. “¡Dime lo que le das a comer, y te diré a qué edad y de qué morirán!” Tristemente, la sangre de Cristo (Apoc 7:14), Cristo mismo, la buena alimentación, tiene en esos templos las puertas cerradas. ¡No están siendo lavados! El cielo fue hecho para ellos, pero no será de todos ellos.

9. Por otra parte, los Unzha son una comunidad localizada entre China y Pakistán. Su alimentacion, excepto en invierno que beben leche de cabras, es puramente vegetariana. Las enfermedades que para nosotros son tan habituales como la salida y puesta del sol, entre ellos son historietas que para creer, se necesita de un buen ejercicio de la fe.

10. ¿De qué edad nacen los Niños Unzha? De la misma que los niños no Unzha. ¿De qué edad mueren? ¡Ahí está el detalle! Mejor es hablar cuánto tiempo viven, pues los niños ahí “no mueren.” Se dice que él promedio de vida en esa comunidad es de 115 años. Esto es sumamente alto comparado con el nuestro.

11. Un médico me dijo una vez que los Unzha vivían hasta los 250 años. No lo dudo, pero es difícil comprobarlo ya que en esos lugares, la gente nacía, vivía y vive sin contar los años. La realidad es que así como la pobre alimentación tiene su precio, la buena también. Los Unzha, por siglos, han gozado de ese precio. El pago—en salud, ha sido muy alto. Ancianos centenarios gozando de una salud tan perfecta como la de un niño en los primeros años de vida. Una mujer de 50 años, no tiene nada que enviar a una, en Europa o América, de 15.

12. En Venezuela se dice, “Lo que comienza al revés termina torcido.” Los niños son templos cuya edificación comienza a fundamentarse aún antes del nacimiento. Lo que comen los padres, pondrá los primeros ladrillos de ese edificio.

⁶Instruye al niño en su camino [en el camino al árbol de la Vida] (GÉN. 3:24; APOC. 22:2), Y aun cuando fuere viejo [si los pies del niño no están siendo encaminados hacia el árbol de la vida, la buena alimentación, “no llegará a viejo”] no se apartará de él. —PROVERBIOS 22:6

13. Es imposible apartarse de un buen camino cuando se ha enseñado a caminar por él, comer los frutos de sus orillas, y luego ver el resultado final, la salud fisica y la salvación eterna.

14. Los niños saludables son generalmente muy activos y esto se debe a que sus templecitos están en descanso constante, y por tanto, tienen que gastar un poco de tanta energía. ¿Por qué sucede así con ellos y con los otros no? ¿Por qué hay padres que se mudan a un hospital desde el nacimiento de sus hijos, pero hay otros que si van, solo van de visitas? Porque la alimentación de Dios dio trabaja para el cuerpo, pero la comida que el hombre ha adoptado, pone el cuerpo a trabajar.

15. La mayoría de las cosas que entran a los estómagos de hoy, son tan contrarias a la alimentación que el cerebro las detecta como virus e inmediatamente manda la señal de alerta a los corpúsculos que en vez de estar descansando en un cuerpo sano, trabajan constantemente para combatir la enfermedad.

16. El niño sano tiene que jugar y correr para cansarse un poco, pero el enfermo no puede hacerlo puesto que vive en un templo que está todo el tiempo cansado. Duerme y duerme, pero no descansa; aunque no haga nada, su cuerpo interiormente es como una industria que trabaja 24 horas. Es mejor trabajar todo el día estando sanos, que no trabajar estando enfermos; el cuerpo enfermo siempre está cansado.

17. Si un niño come Génesis 1:29, en su cabeza nunca habrá piojos, las moscas no se irán detrás de él, los mimes lo ignoran, y nunca son picados por mosquitos. El pH ^[1]pH Definición
[ENLACE, Wikipedia] de un niño así está por encima de los 7; y siete es el número de la consumación de la Vida  (GÉN 2:1-3; ÉXD. 20:8-11). Su sangre está limpia. Sin embargo, el de uno que está por debajo de 7, en cualquier llaga puede criar gusanos. Su cuerpo es como fruta podrida para todos los insectos. Está completamente ácido. Un cuerpo ácido, es un cuerpo enfermo, completamente. Cuando está ácido entonces muestra los síntomas que el hombre erróneamente llama enfermedades (cáncer, diabetes, artritis, cirrosis…) pero que en realidad son síntomas de la única enfermedad que existe, sangre ácida.

18. Ya sabemos qué comer, ahora debemos aprender cómo comer. Si enseñamos bien a nuestros hijos, si hemos de morir, pasará lo normal, ¡ellos, contrario a lo que pasa hoy, cerrarán nuestros ojos.

³ Y dijo: Yo soy Dios, el Dios de tu padre; no temas de descender a Egipto, porque allí yo haré de ti una gran nación.
⁴ Yo descenderé contigo a Egipto, y yo también te haré volver; y la mano de José cerrará tus ojos. —GÉNESIS 46:3-4

Ya conoces la informació, pásala hacia adelante. Projeamos los pequeños templos de Dios, y no olvidemos de cuidar el nuestro.

—777IGUEL H. JAVIER

“Salid de Ella Pueblo Mio…” (APOC. 18:4)

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