No Hay Mala Intención En Mí, Pero Sé Que Esto no Va A Gustar,

1) ¿Debo yo creer en quien no conozco?

El Señor me advierte—y te advierte, aún de aquellos que dices conocer (Jeremías 17:5).

No conozco a Elena White, por tanto, no tengo que creer en ella. ¡El Señor no me dice que crea en ella!

2) Muchos hoy se están yendo de sus iglesias o van muy poco a ellas, como es mi caso. Pero, ¿será correcto irse? No, ¡hay que quedarse!
Este expresión parece soñar contradictoria saliendo de un individuo que siempre da un mensaje contrario.

3) Se fué Jesús de la Iglesia? No, pero después, SÍ. ¿Cómo así?

4) Jesús iba todos los sábados al templo y allí leía las Escrituras, LES ENSEÑABA LA PALABRA.

5) ¿Ya no vas al templo? Te recomiendo que vayas, pues todavía no te llaman la policía por no querer mantener a impíos con el ¡diezmo!, tienen aire acondicionado en verano, y—en los países fríos, calefacción en invierno. Aunque ya nada lo dan de grátis, todavía esas cosas son gratis, especialmente en aquellos que tienen claro con quién es el verdadero compromiso de dar.

6) Si no vas al templo, tus razones quizás sean que ya terminaste tu trabajo ahí e hiciste lo que Dios manda a cada centinela hacer, o todo lo contrario, ERES UN IRRESPONSABLE que quieres huir de tus responsabilidades.

7) No dejes de ir si todavía no has hecho lo que Dios te encomendó. No dejes de ir si todavía ellos te quieren ver ahí. No dejes de ir si ellos aún orán por tí. No dejes de ir si todavía te aman. Todas esas son señales de un mal trabajo en la predicación de la verdad o de un trabajo que todavía no se ha comenzado a hacer.

8) Estamos en el DÍA DE EXPIACIÓN. En esa fecha no hay predicación afuera. El toque de puertas ajenas es obsoleto. Hay que tocar primero la puerta del lugar que una vez llamamos casa. Luego le tocará al vecino, pero primero LA CORRUPTA JERUSALÉN. Debe ser amonestada aunque sea obvio que no se vaya a arrepentir.

9) Jesús se fue de la Iglesia, cuando después de mucho ir a ella se presentó como el Mesías (Lucas 4:18) y leyera las siguientes palabras, citadas en Isaías 61:1.

“El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para traer buenas nuevas a los pobres…”

10) Si leemos Lucas 4:18-30, notaremos que de admiración, todo pasó a odio hacia Jesús. Les habló la verdad tal y como estaba escrita para el tiempo en que la verdad debía ser dada.

11) Después de haberles dado la verdad al pueblo, la verdad del momento, Jesús fue llevado fuera para ser muerto. Quisieron matarle el mismo día que comenzó a predicar la VERDAD PRESENTE.

¿Te quieren matar por predicar la verdad como está señalada en Isaías 58:1? Si es así, has hecho tu trabajo y ya puedes empacar tus maletas e irte. Sin embargo—si no es así, LA SANGRE DE MUCHOS TODAVÍA ESTÁ SOBRE TU CABEZA.

12) No es tiempo de irte hasta que para tí no haya una sentencia espiritual de muerte. ¡No has hecho tu trabajo todavía! “Babilonia” aún no ha sido amonestada.

13) Los profetas, si les daba tiempo, se iban cuando ya sus cabezas tenían precio. Se iban cuando amonestar y callar significaba lo mismo. Los discípulos también lo hicieron de ese modo. El Maestro—Mi Maestro, hizo exactamente lo mismo.

Martín Lutero clavó Las 95 Tésis, y no volvió jamás al lugar que por mucho tiempo llamó “hogar”. No tenía que volver.

Amigos, “Siempre nos vamos para no volver”. Aveces nos traen para ser enjuiciados, pero ¡no es lo mismo volver a que nos traigan!

El que se va y vuelve, NUNCA MÁS PODRÁ IRSE DE NUEVO. “El que se va y vuelve, nunca se ha ido.”—ej., El Gambe.

14) Yo no creo en Elena White. Nunca la conocí. No creo en sus escritos. No creo que escribió nada. Pero esto—por supuesto, es mi creer, y  así lo expreso:

En el libro Primeros Escritos, Dios, no la Sierva del Señor, dice:

“Son muchas las verdades que contiene La Palabra de Dios, pero es la LA VERDAD PRESENTE lo que el rebaño necesita”. —PE 63.1

Continúa la profetiza,

“En estas cartas que yo escribo, en los testimonios que yo doy, estoy presentando a vosotros lo que el Señor me ha presentado a mí. YO NO ESCRIBO ni un sólo artículo en el periódico expresando meramente mis propias ideas. Ellas son lo que Dios ha revelado delante de mí en visión—preciosos rayos de luz que brillan desde el trono”. TESTIMONIOS 5, p67

15) Todos los hijos de Dios siempre se han ido del pueblo que llamaban verdadero. ¡TODOS! El pueblo “verdadero” nunca terminó como “verdadero”. Sin embargo, todo el que se fué, siendo él verdadero, terminó su trabajo.

¿Quieres saber cuando termina tu trabajo en el templo?  No es cuando tú te sientas tan incómodo por las aberraciones a tu alrededor, sino cuando ellos se sientan incómodos por tenerte a ti en derredor.

El momento será cuando la luz de tu rostro nadie pueda soportarla y sea mejor que te lleven al monte, como a Jesús, para matarte. AHÍ TERMINA TU TRABAJO CON ELLOS.

Si te vas antes, el remordimiento por no haber hecho lo que Dios te mandó a hacer en el lugar, probablemente, TE VA A ALCANZAR. El mensaje de la verdad presente, lo dan los mensajeros verdaderos que están presentes en esos lugares.

—MIGUEL JAVIER

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Y conoceréis la verdad…
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